La selección uruguaya llegó ayer a última hora a Guayaquil en medio de un clima distendido, sin gritos hostiles ni agresivos, pero con la desagradable sorpresa de encontrarse con sus bolsos abiertos y saqueados en el aeropuerto.
Cuando los encargados de la utilería de la selección esperaban el equipaje en la cinta transportadora, se encontraron con sus bolsos rasgados con navajas y sin varios objetos de la delegación.
Los objetos robados fueron zapatos de fútbol de los jugadores, así como vestimenta deportiva del cuerpo técnico.
Al haber viajado en vuelo charter, con una única escala en el norte de Chile para cargar combustible, el hurto fue en el aeropuerto ecuatoriano, motivando una denuncia con las autoridades.
Superado el mal rato, la delegación partió rumbo a su hotel, donde fue recibida por un puñado de uruguayos que lucía camisetas celestes y dando muestras de adhesión y alegría.
Para hoy está previsto que la selección realice su último entrenamiento de cara al partido de mañana y por la noche parta rumbo a la altura de Quito, donde apenas pasará la noche, buscando minimizar los efectos de la altura.
Hasta hoy, el "Maestro" Tabárez seguía sin confirmar el equipo, aunque todo apunta al equipo que estuvo entrenando en Montevideo, es decir: Fernando Muslera en el arco; una línea de tres con Andrés Scotti, Diego Lugano y Martín Cáceres; Álvaro Pereira y Maximiliano Pereira por las bandas; Walter Gargano, Diego Pérez y Jorge Rodríguez en el medio; y Luis Suárez y Diego Forlán en ataque.
Fuente: Ovaciondigital.com.uy
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