Los jugadores ecuatorianos estimaron que el cotejo contra Uruguay, el próximo sábado en Quito por las eliminatorias sudamericanas mundialistas, será una final pues una victoria mantendría a la tricolor en la zona de clasificación directa.
"Hay que manejar (el partido) con la mayor tranquilidad, la mayor responsabilidad. Es una final para nosotros", dijo Cristian Noboa (Rubín Kazán, Rusia) durante el segundo día de entrenamientos de la selección, que marcha cuarta en la tabla de posiciones con 23 puntos.
El volante agregó que la celeste, sexta con 21 unidades, "viene con todo" en procura de sellar pasaporte para el ecuménico de Sudáfrica-2010.
El mediocampista Fernando Hidalgo (Barcelona) dijo a su vez que "sabemos en la situación en la que estamos, sabemos que el día sábado tenemos un partido importante para el que hay que salir a ganar".
"Necesitamos los tres puntos para estar a un paso del Mundial que todos soñamos (...) es un partido para la clasificación", añadió.
El choque con Uruguay es vital para Ecuador como lo fue en las eliminatorias para los torneos de 2002 (como segundo) y 2006 (tercero), a los que la tricolor accedió tras empatar en la revancha en Quito precisamente frente al elenco charrúa.
"Este partido es uno de los más importantes", expresó el defensa Paúl Ambrossi (Rosario Central, Argentina), quien apuntó que "tenemos las ganas ya de jugar y demostrar por qué Ecuador ha ido creciendo futbolísticamente".
"Siento ansiedad de que se venga ese partido", manifestó por su parte el ariete Edmundo Zura (El Nacional).
De otro lado, el mediocampista Jefferson Montero (Villarreal, España) indicó que "si tengo la oportunidad tendré que demostrar" la experiencia lograda en el español Villarreal, en el cual milita.
"El fútbol en Europa es mucho más rápido, donde uno aprende cada día y siempre hay que estar concentrado", señaló.
En la tienda de Ecuador, que completará las eliminatorias enfrentando a Chile (tercero con 27 puntos) el 14 de octubre en Santiago, hay tensión.
"Ese nerviosismo que no se nos vuelva desesperación", dijo Noboa, quien sostuvo que "entrenamos muy fuertes. Veo a todo el mundo metido" en el choque con Uruguay, con el que igualó 0-0 el partido de ida escenificado el 9 de septiembre de 2008 en Montevideo.
Hidalgo enfatizó que el fútbol ecuatoriano está alcanzando un "nivel óptimo" y que el equipo nacional "cada día se va haciendo más compacto, más sólido".
La tricolor entrenó el lunes con la presencia del zaguero central José Luis Perlaza, convocado a última hora tras la baja del defensa Marcelo Fleitas (de origen uruguayo) por lesión.
El clasificatorio sudamericano otorga cuatro cupos -Brasil y Paraguay ya se aseguraron dos- para el Mundial y al quinto la posibilidad de una repesca contra el cuarto de la Concacaf.
(AFP)
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